¿Por qué es importante desarrollar habilidades que me permitan aprender en la escuela y más allá de la escuela?
Hoy, los sujetos destinan muchas horas de su vida a transportarse de un punto a otro de la ciudad.
Mientras más grande es la urbe, mayor el tiempo destinado a traslados. El uso creativo de
dispositivos móviles convierte estos momentos, aparentemente “muertos”, en potenciales espacios
de aprendizaje informal.
Aprendizaje invisible
Como pudiste darte cuenta, en el ejercicio anterior el aprendizaje se extiende más allá de la escuela,
de manera que los intercambios de experiencias y saberes no son exclusivos del aula, sino que se extienden
con múltiples posibilidades y formas de aprender con y de otros individuos, desde contextos, situaciones y
experiencias cambiantes, tanto así que algunos autores consideran que aprendemos de manera informal 80%,
mientras que de manera formal sólo el 20% de lo que sabemos. Por esta razón, el aprendizaje informal se está
convirtiendo en un aspecto clave del aprendizaje permanente.
De acuerdo con la Comunidad Europea,lo que se busca con la educación y el aprendizaje permanente, es proporcionar a los ciudadanos las herramientas
esenciales que necesitan para realizarse y participar activamente en la sociedad moderna, entre ellas,
las capacidades asociadas a las nuevas tecnologías. El aprendizaje permanente está orientado a promover el
desarrollo del potencial humano, a través de un proceso continuo, que estimule a los individuos a adquirir de manera
constante los conocimientos, valores y habilidades que requieren a lo largo de su vida, el aprendizaje permanente se da
a lo largo de la vida y requiere que los resultados de los aprendizajes provenientes de diferentes ámbitos y contextos,
puedan vincularse entre sí y que las personas podamos utilizarlos en cualquier contexto de nuestra vida.
En este sentido, la Comunidad Europea considera ocho competencias clave para el desarrollo del aprendizaje permanente,
entre las que incluye la de Aprender a aprender, que la define como:
“La habilidad para iniciar el aprendizaje y persistir en él, para organizar su propio aprendizaje y gestionar el tiempo
y la información eficazmente, ya sea individualmente o en grupos. Esta competencia, conlleva a ser consciente del
propio proceso de aprendizaje y de las necesidades de aprendizaje de cada uno, determinar las oportunidades disponibles
y ser capaz de superar los obstáculos con el fin de culminar el aprendizaje con éxito. Dicha competencia significa
adquirir, procesar y asimilar nuevos conocimientos y capacidades, así como buscar orientaciones y hacer uso de ellas.
El hecho de «aprender a aprender» hace que los alumnos se apoyen en experiencias vitales y de aprendizaje anteriores,
con el fin de utilizar y aplicar los nuevos conocimientos y capacidades en muy diversos contextos, como los de la vida
privada y profesional y la educación y formación. La motivación y la confianza son cruciales para la adquisición de esta
competencia”.